jueves, 3 de abril de 2014

Crumble de fresa y manzana

Como parece que la primavera no quiere todavía dar la cara, hoy aparezco con un postre caliente debajo del brazo. No os dejéis asustar por el nombre porque es muy muy sencillo de hacer. Es también una buena forma de aprovechar la fruta que se nos pone madura y no sabemos qué hacer con ella.

Un crumble es un pastel con fruta que lleva por encima una costra (o un crujiente, que suena mejor) de harina y galletas.





INGREDIENTES

Fruta
1 manzana
500g fresas
1 naranja
3 cucharadas de azúcar

Crujiente
75g azúcar
70g mantequilla
100g harina
10 galletas tipo María o digestive

Estas proporciones son para un molde pequeño, de unos 20cm. 


1. Nos encargamos de la fruta: pelamos y cortamos la manzana en dados y por otro lado lavamos y picamos las fresas.  Colocamos los trocitos de fruta en un plato hondo y añadimos 3 cucharadas de azúcar y el zumo de una naranja. Reservamos.


2. Una vez preparada la fruta, precalentamos el horno a 180º, arriba y abajo.


3. En un recipiente tipo ensaladera, colocamos 75g de azúcar y 70g de mantequilla cortada en dados y recién sacada de la nevera. Mezclamos un poco con las manos.

Añadimos el harina y las galletas en migas. Comenzamos a amasar y vamos a ir obteniendo una mezcla con grumos, que no tiene que estar homogénea.


4. En un recipiente apto para horno, colocamos la fruta que teníamos preparada y por encima ponemos la masa con grumos, cubriendo toda la fruta.


5. Ponemos el horno en grill a 180º y horneamos 10-15 minutos. Estar atentos porque está listo enseguida.


6. Servir caliente o templado. Se puede comer solo acompañado de una buena taza de café o incluso para los más valientes se puede acompañar de natillas o helado.



  

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