viernes, 30 de enero de 2015

Tartar de atún rojo

Cualquiera que haya comido alguna vez conmigo o haya hablado (o discutido) sobre comida con mi persona, sabe seguro que a mí las cosas de comer me gustan crudas, crujientes o sangrantes. Por eso mismo, muero de amor con todo este tipo de preparaciones.

Se pueden hacer con carne o pescado (y en este caso lo que más se suele usar es salmón o atún). Lo más importante para éste plato es una buena materia prima y sobre todo, muy fresca (sino... es mejor cambiar el menú).

La receta al final es una mezcla de recetas de todas las veces que he comido este tipo de cosas en bares o restaurantes, que me lo ha preparado gente que cocina de miedo en su casa, que he leído en libros y sí, también en internet.


INGREDIENTES (por persona)


Unos 150g de lomo de atún rojo
1/2 tomate
1/2 aguacate maduro
2 cucharadas de aceite de oliva virgen 
1 cucharadita de zumo de limón o lima
2 cucharaditas de semillas de sésamo y/o lino
1 cucharadita de salsa de soja
1 cucharadita de cebollino picado
Un pizca de sal
Pimienta negra


*Usamos estas cantidades porque lo preparamos casi como plato único, normalmente acompañado por una de ensalada.

**Mucha gente le añade mayonesa y/o salsa Worcestershire o salsa Perrins a la mezcla (en este caso sería 1 cucharadita de cada). Yo sinceramente no lo considero necesario, pero aquí os lo dejo como opcionales.


1. Lo primero es encargarnos del pescado: Nosotros en casa somos unos kamikazes y no congelamos nunca el pescado antes de comerlo crudo (igual no está bien hecho, pero somos muy cabezotas y jamás nos ha pasado nada), pero si sois gente más cuerda, basta con meterlo con cariño al congelador un mínimo de 48 horas.


2. Cortamos el pescado con un cuchillo bien afilado en taquitos de 1cm más o menos. Reservamos.


3. Cortamos también en taquitos el aguacate y el tomate. Mezclamos con el atún (si queréis montarlo por capas con un aro, basta con reservarlos y destrozarlo justo cuando vayamos a comerlo).


4. Vamos a ir añadiendo los distintos ingredientes a la mezcla anterior y cada vez que incorporamos uno, vamos removiendo con una cuchara. 

Lo último que incorporamos es el cebollino y el zumo de limón/lima recién exprimido.


5. Probamos el tartar resultante y corregimos algún sabor si fuera necesario (es mejor quedarse corto y luego tener que añadir un poquito más de sal o salsa de soja, por ejemplo). 


6. Servir inmediatamente y consumir acompañado de una rebanada de pan recién tostado.



lunes, 19 de enero de 2015

Tarta de naranja y manzana

Espero que los excesos navideños no os hayan maltratado mucho y que ya todo el mundo poco a poco vaya recuperando su complexión habitual.

No puedo negar que después de terminar harta de comer y beber durante las vacaciones y tras acabar con el último trocito de Roscón de Reyes, apareció un terrible y repentino sentimiento de culpa y el fiel juramento de todos los años de que voy a pasarme todo enero (y si me apuras, lo que queda de invierno) comiendo de la forma más sana posible. ¡Pero todo el mundo tranquilo! Que ya se me ha pasado ese momento de enajenación mental.

Además, hoy 19 de enero, es el Blue Monday, según dicen el día más deprimente del año (el tercer lunes de enero). Y para combatir la tristeza y depresión que estadísticamente tenemos que sufrir hoy, qué mejor que una tarta de naranja y manzana.




INGREDIENTES

3-4 manzanas
1 naranja
3 huevos M
200ml nata
80g mantequilla
4 cucharadas de harina
1 cucharada de azúcar avainillado
100g azúcar
Pizca de sal

BASE: MASA QUEBRADA
200g harina
100g mantequilla
1 vaso (250ml aprox) de agua fría
1 cucharadita de azúcar
Pizca de sal

1. Hay que empezar con la masa: sacamos la mantequilla que necesitamos de la nevera y la cortamos en dados. Hay que usarla fría, sin que haya empezado a derretirse.

2. En un recipiente tipo ensaladera, ponemos el harina, el azúcar y la sal. Removemos un poco para mezclar y añadimos la mantequilla cortada.

Con las manos empezamos a amasar bien la mezcla y añadimos el agua fría. Seguimos amasando hasta obtener una masa homogénea. Hacemos una bola y la envolvemos en plástico transparente y la dejamos reposar en la nevera 30-45 minutos.

3. Cuando haya pasado el tiempo de espera de la masa, la sacamos de la nevera y precalentamos el horno a 180º.

4. Espolvoreamos un poco de harina sobre la superficie de trabajo (para que no se nos pegue la masa) y comenzamos a amasar con las manos. Con ayuda de un rodillo, conseguimos más o menos un círculo del tamaño aproximado del molde.

5. Engrasamos el molde, ponemos un poco de papel de horno sobre él y lo forramos con la masa, retirando los bordes sobrantes.

Pinchamos un poco la masa con un tenedor y colocamos por encima un puñado de garbanzos (o cualquier otra legumbre que tengamos por casa) para que con el calor se abombe lo menos posible. Horneamos unos 10 minutos.

6. Mientras tanto empezamos con el relleno: pelamos las manzanas y las cortamos en trocitos, menos una de ellas que la vamos a cortar en láminas. Reservamos.

Cogemos la naranja y rallamos parte de la piel (un poco menos de la mitad es suficiente). La exprimimos y reservamos 50ml de zumo.

7. En un recipiente añadimos los huevos, la nata, la mantequilla (previamente derretida) y el zumo de naranja. Con ayuda de unas varillas vamos mezclando y añadiendo el azúcar, el harina, la sal, la ralladura de naranja y el azúcar avainillado.

Cuando la masa esté homogénea, añadimos los trocitos de manzana (excepto los cortados en láminas).

8. Retiramos la masa quebrada del horno y quitamos los garbanzos (o lo que hayamos usado). Vertemos el relleno y distribuimos la manzana de forma un poco uniforme porque sino va a quedarse toda en el centro. En la capa superior colocamos los trozos de manzana cortados en láminas, intentando que se hundan lo menos posible.

9. Horneamos a 180º durante unos 40 minutos. Retiramos cuando esté dorada la masa y la tarta esté firme. Esperar un ratito para desmoldar (al menos 30 minutos) para evitar desastres.

10. Servir en frío.

No es necesario preparar un acompañamiento o topping, pero si os apetece o os parece que le falta algo, podéis ponerle una fina capa de mermelada de naranja o melocotón por encima.