Me han caído ya 25 años, y todavía hoy admito felicitaciones y tirones de orejas a los despistados.
Desde hace un tiempo, me he convertido en la repostera oficial (a la par que cocinera) de las celebraciones y eventos y claro... ¿quién me iba a hacer la tarta a mí?
Pues como era de esperar, fui yo misma a la cocina y me puse manos a la obra con ésta tarta de chocolate y cerveza Guinness, que es una de mis tartas favoritas.
La receta original es de Nigella Lawson. Aunque ya siempre la hago con las mismas
modificaciones:
INGREDIENTES
MASA:
250ml cerveza Guinness
75g cacao en polvo sin azúcar
2 huevos
150g mantequilla
320g azúcar
140ml nata líquida para montar
250g harina
2,5 cucharaditas de bicarbonato o 1/2 sobre de levadura
FROSTING/COBERTURA:
200ml nata líquida para montar
100g queso crema
60g azúcar
1. Precalentamos el horno a 180º.
2. En un cazo, ponemos los 250ml de cerveza a fuego lento.
3. Troceamos la mantequilla y una vez que la cerveza esté un poco caliente, la añadimos, y vamos removiendo. Una vez que la mantequilla se ha disuelto, lo retiramos el fuego y reservamos.
Es importante que no llegue a hervir ni ésta mezcla ni la cerveza sola.
4. En un bol o ensaladera, mezclamos bien los ingredientes secos: harina, azúcar, cacao y levadura/bicarbonato.
5.En otro recipiente, mezclamos por otro lado huevos, nata y la mezcla de mantequilla y cerveza. Batimos todo bien con ayuda de unas varillas.
6. Mezclamos ingredientes secos y húmedos y batimos bien. La mezcla resultante es bastante líquida.
7. Engrasamos el molde, si es necesario, y vertemos la mezcla.
8. Horneamos a 180º durante 45-50 minutos.
9. Una vez transcurrido ése tiempo, comprobamos con un pincho/tenedor que esté bien hecha.
La retiramos del horno, y esperamos al menos 20-30 minutos a que se enfríe un poco para desmoldar.
10. Para preparar el frosting, primero montamos la nata con unas varillas.
11. Una vez montada, añadimos el azúcar, y vamos incorporando cucharadas de queso crema a la vez que removemos, hasta que obtengamos una mezcla consistente.
12. Vertemos el frosting sobre la tarta y extendemos con ayuda de una lengua.
Para añadir el frosting, la masa debe de estar fría del todo, así que hay que hacerla con tiempo.
13. ¡¡Servir y devorar!!